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viernes, 18 de marzo de 2016

DIOS Y EL PENSAMIENTO CONTEMPLATIVO





                                                                 

                                                                     DIOS Y EL PENSAMIENTO CONTEMPLATIVO


A ) En  el mundo espiritual hay   cosas que deberíamos saber; se trata de lo siguiente;   a veces no nos damos cuenta; ya que  cuando estamos pidiendo a Dios  un milagro ;  algo concreto, por ejemplo la salud de alguien  y esa persona fallece, en lugar de volvernos contra él;  ver como realmente ese milagro se dio;  de que realmente el milagro se dio,  se dio,  no de la  manera en que nosotros queríamos; ya que cada suceso, que cada cosa acontecida,  se refleja,  por decirlo así,  en ese otro lado,  en algo  que no vemos; en alguien,  que aun ni hemos visto, pero que está profundamente relacionado con la persona o con el hecho,  por el cual hemos estado pidiendo.
 Hablo aquí, del otro lado  de la faz; de la otra cara de la moneda;  Y el asunto está también, en extraer,  la enseñanza ¿Cuál es la enseñanza? ¿Para qué sucedió eso?  ¿Cuál es la moraleja? ¿Y lo que tendríamos  que ver de este acontecimiento?
 Un acontecimiento  puede ser particular o general o ambas cosas.
El descubrimiento de estas cosas,  solo se consigue en  el trato continuo,  del pensamiento contemplativo.
Es un acto que viene del alma.
B) El sufrimiento hay que valorarlo; porque es atraves de él; como nuestra alma, y nuestra vida se reivindica, el sufrimiento tiene una dimensión espiritual,  muy, muy grande, muy importante para nuestra vida espiritual; me refiero a esos  sucesos que se dan, sin que tú los vayas a buscar a propósito.
Porque no se trata de eso. Cuando nos damos cuenta de su importancia, debemos aprovechar cada circunstancia de este tipo para reparar por nuestros  errores y los de la humanidad entera. Atraves  del sufrimiento,  reparamos, cuando nos centramos en  Dios y somos humildes de corazón.
 Aunar el sufrimiento y el dolor a una reparación  y a una bendición es unir nuestra vida al infinito.
Nuestras vidas, nuestras sociedades están tan llenas de rotos, de huecos y de  remiendos por todas partes;  por   las cosas que hemos hecho mal; que se hace necesario reparar,  con buenas acciones esos actos equivocados  y hasta crueles y  malvados;  sabemos que la vida es una rueda gigantesca,  que siempre está  girando; y lo que hacemos bien, para bien regresara y lo que hacemos mal,  también regresara.
 Dios y la vida son justos; de manera que la piedra que lances se moverá contra ti, en otro momento y bajo otras circunstancias.  El dolor que infrinjas hoy será para ti y lo tuyos mañana.
C)  Rezamos y el  rezo nos lleva a la oración; pero a veces pedimos algo y no se nos da; porque,  ni rezamos, ni  oramos lo suficiente y nos dejamos llevar de la pereza. La pereza es un egos  que todos debemos combatir. 
Existen muchos otros egos,  que nos atan,  a la hora de rezar y de  orar y  de entregarnos a servir a otros; eso egos es necesario conocerlos para tratar de hacer que se disuelvan.
 El resentimiento es un ego que hay que trabajar mucho, para quitarle carne y para que deje, de ser el protagonista  en nuestras vidas.
 Una  persona espiritual,   sabe que existe la justicia, por lo tanto no intentara vengarse de nada, ya que ese mero  hecho, causara  aún más  dolor a nuestras vidas.
 El resentimiento es un dolor que debemos superar con amor.
También es muy importante dar gracias siempre y por todo, reconocer que lo que está sucediendo nos ayuda a madurar y a mejorar.
D) Es necesario unificar fuerzas para salir adelante, antes de que nos hundamos en la gran catástrofe final; cambia tu corazón y se amante de Dios y de la naturaleza, de los animales, cuida, cuida tu entorno, es muy, muy valioso y no lo dejemos perder.
Beatriz Elena…

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