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jueves, 27 de octubre de 2016

RESPUESTA



RESPUESTA


Y ahora me pregunto sin la calcinación del sol a mis espaldas; ¿Pero qué es el presente?, si no sólo esta lluvia que cae mojando mi cabeza y mi cabello negro y rebelde.

Los sonidos de las llantas de los carros, rechinan contra el pavimento y aun el sonido de la lluvia al caer, chasquea sobre las hojas y se derrite sobre ellas y sobre las ramas de las ramas y sobre la maleza fértil e in fértil y sobre los gusanos y sobre las larvas de las larvas y más abajo, abajo de la tierra germinan las semillas que subieron y treparon por las hondas raíces de los árboles y se convirtieron en arboledas, que los in fértiles cortaron y destruyeron de un tajo. De un tajo destruyen la vida; querrán en nombre del progreso pisotear las semillas y construirán sus casas y sus palacios y hechizados y henchidos de placeres y sin placenta querrán como ladrones comer del fruto prohibido.

Comerán del fruto prohibido, pero pronto vendrá la noche y ¿qué es lo que sabrán ellos  de la noche?; engrandecidos duermen, ahí tos y hartos de sus horrorosas placentas,  palidecerán de pronto, porque de repente les llegarán las plagas y el comején arruinará sus palacios y el que es surgirá de entre las sombras y a todos los que se han engrandecido con su maldad los pasará de espada y los tragará el abismo.

¿Entonces qué es el presente?; sino sólo esta lluvia que cae mojando mi cabeza e inundando mi frente... y latirán inconclusos para algunos los sonidos de la noche, porque para el que no oye, todo se pierde en sutiles banalidades; más el que oye prolongará su existencia más allá de la vida, de las cosas y en su roce con ellas entrará más acá del silencio.


Beatriz Elena Morales Estrada
Extraído de mi Obrita Silencio De Alas; tercera parte
Derecho de autor reservado.


Walter

Beatriz, jijee... (Me río de satisfacción, ya sabes...). Créeme que cada vez que llega un poema de tu autoría es como que, tomo un racimo de uvas y cada verso es una, que voy degustando y cuando llego al final, es como que se forma una copa de vino y brindo por él. Dirás que estoy loco, pero así lo disfruto. Lean algo distinto jeje, que estrategia. Buenas metáforas para que el que quiera oír que oiga. La necedad humana explicada en riquísimos versos. In fértiles que en definitiva atenta contra sí, imbuidos en la soberbia que el ser hijos de la placenta, y haber cortado el cordón, no significa prescindir de ella. ¿Qué sabrán de la noche? , cuando llegue la noche si son absurdos con su propio presente y ahí tos y hartos de sus horrorosas placentas...los sorprenderá la negra noche. Que la lluvia de nuestro presente siga mojando tu cabeza y tu cabello negro rebelde. Poeta. ¡Te felicito!

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