El rosario de María
El rosario de María nos está librando de todo mal
y peligro. De toda índole. Alabemos noche y día a la reina celestial.
Ella es camino seguro al hijo… ¿Conocen ustedes alguna madre que no conozca
bien a su propio hijo? Pues bien, hay la tienen
a ella… incluso es quien lanza a Jesús a realizar el primer
milagro, que fue nada más ni menos, que su camino de iniciación; aunque claro ya el venia signado…
“Hagan
lo que él les diga”
Fueron sus palabras y ese fue; la conversión del agua en vino ¿Qué tal?
Incluso que debió ser súper exquisito.
El rosario
o la oración, no solo es
para los beatos, las monjas, los santos o nosotros los tontísimos cristianos como yo; es para todos, desde el más pequeño, hasta el más grande. Debemos orar, rezar todos los días, el santo rosario; no lo olvidemos por favor.
Recordemos que el rosario de María, nos
está librando de todo mal y peligro,
incluidos los del alma. Antes de la pandemia, antes de la quemazón de la naturaleza, antes
de tantos desastres, se nos ha pedido que oremos; antes de Jesús, todos los profetas fueron grandes orantes y Jesús también, estaba en oración siempre. Siendo Jesús el
gran culmen o principio y fin de todo lo creado.
Debemos orar
y rezar el rosario, todos los días. Una vez que se vuelve
costumbre, es difícil de que se nos quiten las ganas de
hacerlo; siendo conscientes de lo que
decimos al rezarlo y ofrecerlo a Dios, como una propiciación, como una manera de
despertar en Dios su santa misericordia; para que cese
ya su enojo.
Si está
enojado, recuerden que es con justa
razón. La tierra, la humanidad, el
universo todo; son obra de Dios, no del
hombre. La tierra es de Dios, la
naturaleza todo es de Dios; fue creado por el espíritu santo.
Beatriz Elena Morales E
BEME
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